En  2015, líderes de todo el mundo adoptaron 17 objetivos globales (ODS) que deben alcanzarse para el año 2030. Estos objetivos son parte de una agenda de Desarrollo Sostenible basada en un equilibrio armónico entre lo económico, lo social y lo ambiental.

La Agenda plantea metas e indicadores claros que se basan en cinco ejes:

• El fin de la pobreza y el hambre en todas sus formas.

• El cuidado del planeta.

• Asegurar la prosperidad para que todos los seres humanos puedan disfrutar de una vida plena.

• Favorecer la construcción de sociedades pacíficas, justas e inclusivas.

• Promover las alianzas y solidaridad entre países para lograr el Desarrollo Sostenible.

Pero, ¿Qué rol tienen las empresas?

Sin duda, una agenda tan ambiciosa necesita del accionar conjunto de los gobiernos, la ciudadanía, las organizaciones del tercer sector, y por supuesto, las empresas.

Esta participación empresarial en la agenda ha ido aumentando en los últimos años, sin embargo, se distinguen dos cuestiones: por una parte, se asocian las acciones por los ODS a una mayor inversión, con lo que parecería restringirse este tipo de proyectos a las empresas de mayor tamaño. 

Por otro lado, como expresa el Coordinador Ejecutivo del Pacto Global Argentina, Flavio Fuertes, “el mundo corporativo lo podemos dividir, a grandes rasgos, entre las empresas conscientes de su rol en la sociedad y aquellas que consideran que su único rol es la maximización de las ganancias”. 

Se suman además otras cuestiones como la pandemia de COVID-19, el cambio climático y los conflictos violentos…

Entonces, necesitamos que las empresas con mayor estructura y recursos sean más ambiciosas en sus proyectos de sostenibilidad, y que las pequeñas y medianas empresas (que en datos del Banco Mundial representan el 50% del empleo) puedan incorporarse a la agenda con acciones concretas de acuerdo a las diferentes realidades y capacidades. 

¿Por dónde comenzamos? 

FORMACIÓN: 

Un punto clave es que haya información y herramientas al alcance de las empresas de todos los tamaños, con especial énfasis en las PyMEs. 

Desde el conocimiento y la sensibilización con la agenda de los ODS, cada empresa puede asumir un compromiso y establecer cuáles son los objetivos concretos por los que trabajará… quienes lideran estas organizaciones tienen el desafío de incorporar la agenda 2030 a la agenda propia de la empresa y reinvertar el modelo de negocio.

Para conocer más, podés visitar la página de Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU 

PLANIFICACIÓN:

Es importante mapear cuales son aquellos objetivos en los que la actividad empresarial podrá generar un mayor impacto y en base a eso definir acciones concretas, medibles y acordes a las capacidades de la empresa. Trabajar una matriz de riesgos y oportunidades para en función de ella alinear los objetivos, es un buen comienzo…

Del informe de la CEADS del último período, surge que la contribución directa de las empresas estuvo vinculada mayoritariamente a los ODS 4 (Educación de calidad), ODS 12 (Producción y consumo responsable) y ODS 8 (Trabajo decente y crecimiento económico).